Los colombianos somos egoístas a
la hora de conducir un vehículo. Te contamos más sobre el este tema en el
siguiente artículo:
Además del miedo y el estrés, el
egoísmo es una emoción bastante popular a la hora de manejar un vehículo en
Colombia. Así lo revela el “Primer
estudio de comportamiento y seguridad vial” realizado por el Fondo de
Prevención Vial.
¿Y qué significa el egoísmo al
volante? Según esta organización, el conductor piensa que los demás son quienes
sufren y ocasionan accidentes de tránsito,
que las normas se hicieron para incumplirlas y que son mejores
conductores que la mayoría. El ego en todas sus dimensiones.
No soy yo, son los otros
La problemática aumenta y parece
que nadie quiere asumir responsabilidades. Según la encuesta, el 62% de los conductores respondió que son
los motociclistas los más vulnerables de sufrir un choque, seguido de los que
conducen en estado de embriaguez con el 31%, los conductores de los vehículos
de servicio público con el 4%, los peatones 2%, los conductores particulares 1%
y la “gente como usted” el 0%.
A pesar de estas respuestas, el
49% de los entrevistados sí han estado envueltos en algún choque o colisión contra
un objeto fijo, objeto fijo o contra un peatón así sea una vez en la vida. El hecho, según la mayoría de los encuestados, fue culpa de otras personas.
Los “mejores conductores”
Otro de los más interesantes
datos de este estudio es que casi la totalidad de los encuestados se creen mejores conductores que el resto. El
62% dice que maneja “como el promedio” el 37% “mejor que la mayoría” y apenas
el 1% reconoce maneja peor que la mayoría.
Además, el 71% se cree “muy
prudente”, el 22 % “algo prudente” y el 7% “nada prudente”, aunque el 52%
reconoce que de vez en cuando es necesario realizar maniobras arriesgadas.
Opinión sobre las normas
Además de calificarlas como
“severas” en su mayoría, los encuestados respondieron que existen razones para
violar las normas de tránsito. De esta manera:
El 79% respondió justifica desobedecer las
normas cuando es la única manera de evitar un trancón (contra el 21% que no lo
justifica).
Cuando es la manera más rápida de
llegar más a algún lugar, el 81% violaría la norma, (contra el 19% que no lo
haría).
El 83% respondió que cometería una infracción de tránsito
cuando es bastante seguro de que no será castigado (contra el 17% que no se
arriesgaría).
cuando alguien lo ha hecho y le ha ido bien
(86% contra el 14%).
Cuando es lo acostumbrado (87%
contra el 13%).
El mensaje es claro: el exceso de
confianza en nosotros mismos nos quita la noción del riesgo de sufrir un
accidente de tránsito, pues nos hace creer, erróneamente, que nada puede
pasarnos, a pesar de no cumplir debidamente con la ley. El egoísmo de creer que vamos solos en la vía
nos hace vulnerables de ser víctimas de un hecho tan doloroso como este Solo
con la conducción preventiva podemos llegar seguros a nuestros destinos.
Fuente: sura